jueves, 7 de noviembre de 2013

LA OVEJA PERDIDA

   Un día, Jesús contó esta historia:

"Había una vez un pastor que tenía cien ovejas. Las quería mucho a todas, las conocía y llamaba a cada una por su nombre. Un día, una se perdió. Entonces, el pastor se puso muy triste y salió a buscarla. Cuando la encontró, se alegró mucho y la abrazó".
(Adaptación del relato de Mt 18, 10-14)



Jesús contó esta historia para enseñarnos que nuestro Padre Dios cuida de cada uno de nosotros y se pone triste cuando nos perdemos y nos portamos mal, y se alegra mucho cuando nos portamos bien, nos acercamos a Él y le queremos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario